miércoles, 26 de octubre de 2011

Mamá





Estaba oscuro…

Solo el rayo de luz de tus ojos.


Me enseñaste a respirar,

y tus entrañas acariciaban

mi frágil cuerpo.


Soñaba con colores

y te imaginaba hermosa;

Fueron nueve meses en un mundo rosa.


Crecí de a poco con tu calor,

me alimentaste con tus caricias

y frases de amor.


El momento llegaba,

iba a conocerte,

estaba muy protegida

con miedo de perderte…


Se hizo la luz,

una mañana de agosto

¡Mamá, sí estabas tú!

Tan maravillosa y tan dulce,

Como te había imaginado.


Aprendí, con el correr del tiempo

y en mis andanzas peligrosas

de cada uno de tus consejos

valorados en cada acto,

de mis diecisiete años;

y soñando cada vez

que me encuentro lejos,

contigo y con nuestros

momentos viejos.



Firmado: Tatiana Aguilera.

No hay comentarios: